¿Hay algo que nos pueda separar del amor de Dios? Esa es la pregunta ¿Puedo alejarme demasiado? ¿Esperar mucho tiempo? ¿Cometer demasiados errores? ¿Puedes mis pecados superar el amor de Dios? La respuesta se encuentra en una de las palabras más dulces de la vida – GRACIA